WOODPECKER

Entre la bruma crepuscular se perfilan unas enormes antenas de 150 m. de alto y 900 m. de largo, son los restos del Radar DUGA-2, que junto a su gemelo DUGA-3, se encuentran todavía en Ucrania, cerca de Chernobyl, con los sistemas electrónicos desmantelados desde finales de 1989, cuando finalizaron sus operaciones, posiblemente tanto porque ya tenían programada la fase final de la desaparición de la U.R.S.S como por obtener una mejor fiabilidad y rendimiento con la red de satélites de alerta temprana, ya plenamente instalada precisamente por aquellas fechas.

Formaban parte del sistema para detectar la aproximación de misiles del tipo OTHR (Over The Horizon Radar) basado en utilizar la Ionosfera como espejo para reflejar la señal y su rebote, superando así el obstáculo que representa (salvo para los terraplanistas) la curvatura de la Tierra y logrando detectar exitosamente y hacer un seguimiento de los misiles de prueba que se lanzaron desde Baikonur, desde el Océano Pacífico y desde Nueva Zembla.

El apodo de "pájaro carpintero" procede del característico sonido que provocaba su funcionamiento al ser captado en las radios de onda corta, con una frecuencia de entre 7MHz y 20MHz, desde que inició su andadura, curiosamente, cuando el sistema SAFEGUARD de los U.S.A. echaba el cierre: a principios de 1976.

- DUGA-2 cerca de Prípiat (Zona de Exclusión) -

Una instalación tan prominente al aire libre no podía ocultarse y los estadounidenses eran plenamente conscientes de lo que se trataba pese a que los soviéticos negaran su existencia. Los occidentales trataron de interferir en las emisiones de los DUGA sin, aparentemente, mucho éxito y la OTAN les asignó la denominación de Steel Yard.

Coincidiendo en un cierto paralelismo con los americanos, en 1978 se iniciaron las obras del sistema antimisiles A-135 basado en el radar de alerta DON-2N con un alcance de 3.700 Km. Plenamente operativo a principios de los años 90 se encuentra en la zona de Moscú.

- DON-2N cerca de Sofrino -

Aparentemente es una combinación del PARCS y el MSR de su contraparte norteamericana, aunque, llamativamente, si bien tiene cierta forma piramidal, en realidad lo han dejado en un trapecio y notoriamente sus discos de radar activos se encuentran desplazados del centro en cada uno de los lados, de tal modo que sus centros no confluyen en un solo punto en el interior de la construcción. a diferencia de lo que pasaba con el MSR que tan solo estuvo activo 3 días.

La versión soviética mide 33 metros de alto, 130 metros por lado a nivel del suelo y 90 m. en el techo; cada uno de los discos de radar tiene un diámetro de 18 metros y como curiosidad sobre el buen entendimiento que ha habido siempre entre los mundialistas U.S.A. y la identitaria Rusia, en los planes de Guerra Atómica de los Estados Unidos de América (SIOP) de 1998, estas instalaciones cercanas a la capital de la Federación Rusa tenían asignadas para ser atacadas 69 cabezas nucleares en lanzamiento consecutivo.

Por muy diversos motivos Rusia nunca ha dejado de ser el enemigo número 1 en la mentes de los estrategas norteamericanos, incluso cuando (¡las vueltas que da la vida!) los rusos valoraron incorporarse a la OTAN a finales de los años 90, fue U.S.A. (a diferencia de Europa) la que no quiso ni oír hablar del tema y cercenó cualquier posibilidad en tal sentido. No hay que olvidar que todo el continente europeo es simplemente un feudo de los E.E.U.U. y se le rinde la debida pleitesía al Tío Sam. De la actual crisis en Ucrania los grandes ganadores, independientemente del resultado, es el mundo anglosajón y la Banca, que llevan años deseando una reedición de la Guerra Fría para justificar desorbitados gastos militares y continuar la expansión de su imperio, con la vista puesta a una guerra (o lo más parecido a ella) que abra paso (por fin) a un nuevo ciclo en la economía capitalista; tal y como vimos en el artículo "K-WAVE / WELLE de Nikolái Kondrátiev" el 29 de Abril del 2021; o lo que es lo mismo, AGENDA 2030.

Pero volviendo a lo que nos ocupa, el diseño de los radares de alerta temprana ha cambiado notablemente. En la actualidad los más modernos son del tipo VORONEZH, que no se parecen externamente en nada a los anteriores. Iniciaron su servicio en el 2009 en diversas posiciones a lo largo y ancho de Eurasia, incluyendo el enclave de Kaliningrado (Königsberg) y tienen prevista su modernización para el 2028.

- Radar VORONEZH en Bielorusia - 

Son los herederos directos de los Daryal (Daugava 5U83) que con un alcance de 6.000 Km. tan solo llegaron a construirse 2 de los 8 previstos en 1984 y que hubiesen cubierto casi los 360º alrededor de la mayor parte central la U.R.S.S.

Una de estas instalaciones abandonadas se encuentra en Mukácheve, Ukrania, cerca de la frontera con Hungría y Eslovaquia.

- Recreación artística de los militares U.S.A. de un Radar Tipo DARYAL (5N79) -

Naturalmente el actual conflicto en Ukrania no tiene nada que ver con recuperar ruinas de la época soviética, pero si finalmente Rusia se queda esa por todos codiciada región, cuna de la gran nación eslava de los Rus y sus riquísimas tierras negras... puede que hagan un reciclaje de las viejas instalaciones, ahora que les ha quedado más que claro (si es que aún albergaban alguna duda) de que occidente en general y U.S.A. en especial, lo único que desea es su desaparición como nación y como pueblo.

Esta posible reutilización de los WOODPECKERS v.2.0 se debe a que, al menos según la  la propaganda del Ministerio de Defensa de la Federación Rusa, este tipo de radares sigue utilizándose con gran éxito (o eso dicen), ya que, si no es una mentira, el radar de alerta temprana KONTEINER (OTHR) en Mordovia puede detectar y rastrear todo tipo de aeronaves incluyendo los misiles de crucero y los hipersónicos. Entró en servicio el 1 de Diciembre del 2019 y según declaraciones del Ministro de Asuntos Exteriores Sergei Lavrov el 28 de Enero del 2020, este radar fue capaz de detectar varios cazas F-35 cerca del espacio aéreo de Irán tras haberse producido un ataque con misiles a una de las bases U.S.A. en Irak.

El aspecto guarda cierto parecido con el WOODPECKER original y teniendo claro quien es su enemigo mortal ayer, hoy y siempre, si Ukrania vuelve al seno de Rusia puede que en la histórica zona de Prípiat "reverdezcan" ciertas instalaciones con una tecnología actualizada.

- Radar KONTEINER en Mordovia -

"Cuando cayó el comunismo lo peor no fue enterarnos de las matanzas de Stalin, ni de cuánto nos habían engañado con los ideales comunistas... Lo peor fue descubrir que sobre el capitalismo nos habían dicho la verdad."

- Chiste ruso de los años 90 del s.XX -

Documental recomendado, año 2004: https://www.youtube.com/watch?v=TCifaaA8AGk

Esto es lo que occidente quiere para Rusia y si es posible, llegado el tiempo, para el planeta entero. En realidad ya casi lo han conseguido gracias a las guerras por la libertad y la democracia, así como al sistema bancario internacional de deuda exponencial eterna en una casa de putas de pueblos e individuos. Lo de Ukrania ahora es simplemente una fase más en la demolición del antiguo ciclo para iniciar uno nuevo.