BIFURCACIONES

María de la O, ¡qué rica estabas en esta foto!. Bueno, en realidad María Orsic y montaje fotográfico...

Por INTERNET circulan todo tipo de historias y fantasías varias, hay sitio para todo el mundo de cualquier cosa traída literalmente "por los pelos" y, al parecer, sobre esta señora, también circulan una buena serie de cuentos de lo más incomprobables.

Aparentemente existió en realidad y perteneció a una de esas oscuras sociedades que han dado pábulo a historias de miedo / esperanza, según el color del cristal con el que se miren hechos y circunstancias que datan ya de hace prácticamente un siglo. Algunos dan la explicación de sus largos cabellos a una supuesta forma de "antena" para las comunicaciones a las larguísimas distancias estelares que nos separan de la zona de residencia atribuida a sus "contactos" en aquellos supuestos mundos. Sin embargo, no hay que perder de vista que, en cualquier caso, tales "contactos" e información serían en realidad de carácter necesariamente mental-espiritual, por la propia esencia de las "comunicaciones" y que su peinado tiene un estilo tradicional de toda la vida en las mujeres que, con más o menos acierto en Japón denominan "cabello de doncella", por su parecido con las hojas de un vegetal cuyo nombre popular es así "Cabello de Doncella", existiendo desde hace más de 250 millones de años como superviviente de los antiguos bosques y extinciones hasta el momento: Ginko Biloba, un árbol que tradicionalmente simboliza la esperanza y la paz en China, de donde era originara su zona de supervivencia en tiempos modernos.

Y sobre la doncella que nos ocupa la leyenda cuenta no solo sobre los "contactos" estelares, sino que  también residió en Berlín hasta poco antes de la caída de la ciudad en Mayo de 1945, dejando supuestamente en la Casa Madre habitual la lógica misiva para sus correligionarios en tales peligrosos momentos: "Nadie queda aquí", como si hiciese falta animar a salir corriendo cuando los soldados bolcheviques estaban a las puertas de la ciudad o fuese una suerte de mensaje fácilmente entendible por si algún compañero despistado aterrizaba de vuelta en las dependencias de la Orden en aquellos turbulentos días finales de la Guerra.

 

Esto se ha interpretado como que (debido a las especiales características y actividades de esta rama o más bien "ramita" dentro de la mitología del III Reich) en vez de seguir la lógica y previsible ruta en 2D recorriendo los senderos de escape hacia Sudamérica, se deja abierta la posibilidad de escape en 3D, es decir, hacia arriba y bien lejos hasta las estrellas en uno de los famosos Haunebu (Hauneburg-Geräte), es decir, los populares "platillos volantes nazis" cuyas artísticas interpretaciones modernas han quedado muy chulas y capaces de hacer volar la imaginación.

¿Pero fueron capaces de hacer volar algo más?.

Según algunos ciertamente sí, al punto de que siguen con sus relativamente discretas actividades en la Luna y otros lugares más cercanos, como el Cerro Uritorco (Córdoba, Argentina), donde una madura testigo de un curioso encuentro en la 3ª Fase describió a los ocupantes del "platillo" como "buenos mozos, ya sabe, así... altos y rubios, eran buenos mozos", mientras apenas podía contener las sonrisas del azoro a la cámara.

Bueno, lo mismo eran un par de suecos "gays" de acampada que habían salido de la tienda de campaña tipo "igloo" iluminada como una bola de luz por la lámpara del camping gas del interior; de noche con una lugareña algo "tomada" y/o con ganas de notoriedad... 

Y es que (hay que joderse) siempre "arrimamos el ascua a nuestra sardina", porque nos conviene, naturalmente, o por los avatares de los malos entendidos, o sabiamente guiados...

- Kenneth Arnold en 1966 -

- Horten Ho-229 V1 -

Arriba el Sr. Kenneth Arnold explica a la cámara en 1966, con una representación artística de lo que vio cerca del Monte Rainier el 24 de Junio de 1947, que así eran las 9 aeronaves y que además de ir muy rápido, a velocidad supersónica le pareció, repitió su testimonio originario: "y en un momento maniobraron haciendo cambios de altura como si fuesen platillos volando sobre el agua y rebotando" (la cursiva es mía). Naturalmente, la gente se quedó con el popular Flying Saucers y el resto es historia.

En realidad no cuesta mucho imaginar que el Piloto Alfa de la formación hizo un par de "botes" bajando y subiendo en la trayectoria de vuelo, siendo imitado por el resto al llegar al punto X1 de inicio de maniobra.

El aire de familia entre ambas imágenes de las aeronaves es evidente. A cierta distancia e incluso disponiendo de prismáticos al piloto le hubiesen parecido lo que representó: unas alas volantes de brillante metal (alumino) con cabina, donde otros rasgos como las pequeñas salidas de las turbinas o las superficies de control pasaron completamente desapercibidos.

Cuando elegimos creer algo sobre el pasado propio o ajeno del cual lo desconocemos todo y se carecen de pruebas, podemos elegir creer cualquier cosa, la que nos cuenten o la que nos contemos a nosotros mismos en base a lo que nos apetezca. Si esto es así hoy en día, con el tema de moda disponiendo de una pléyade de "pruebas científicas" en uno u otro sentido, según nuestras filias y fobias sobre el "bicho y los brebajes mágicos", qué no será sobre temas del misterio puro y duro, OVNIs/UFOs y las "dominantes" lagartijas galácticas más torpes de la historia del universo, los dinosaurios, el Ratoncito Pérez (Fairy Tooth) y los cristos que pueblan las leyendas de ciertas religiones desde hace unos 5000 años...

Cuando mentimos y logramos engañar también creamos "bifurcaciones", mentales sin duda, ¿cuánticas?, posiblemente. Hasta el día de la prueba final...

Por eso, cuando contamos un cuento hay que dejar claro que es precisamente eso, del mismo modo que es mejor, para nuestro destino, callar o preferir decir la verdad aunque resulte oneroso. La verdad tiene fuerza por si misma y esa convicción se proyecta hacia afuera y en derredor.

Esto de acosar, perseguir y presionar por nuestro propio bien y salud es tan llamativo... Ojalá tuviesen tanta insistencia en bajar los impuestos, reducir el precio de la energía o construir viviendas fabulosas a bajo precio.

¿Esa feroz preocupación es por nuestro bienestar o por alguna otra historieta?.

Cuando se cuenta una historia, incluso la de la humanidad y el mundo, siempre se hace con una intención.

La otra versión sobre la historia de María Orsic cuenta que pudo escapar de Berlín sin ser mancillada por los soviéticos. Algún tiempo más tarde logró llegar a USA (como muchos otros) instalándose en Brooklyn, zona típica de inmigrantes, posiblemente se pasase al Tarot y la Quiromancia además del Espiritismo para sacarse algunos dólares, se casó y tuvo un par de hijos, muriendo allá por los años 80 del s.XX.

Reconozco que me gusta mucho más el cuento que la sitúa navegando en su platillo volante por el espacio sideral, dejándose ver por la Tierra de vez en cuando con toda su gloriosa melena flotando al viento, las carnes prietas bien enfundadas en un ajustadísimo traje de vuelo que deja poco lugar a la imaginación sobre sus curvas y relieves, incluyendo senos apuntando al cielo en claro desafío a la fuerza de la gravedad y el paso de los años... 

Creo recordar haber visto alguna peli porno con esta temática, aunque eran dos las ocupantes de la nave espacial que aterrizaba.

Bueno, en cualquier caso, mejor no olvidar nunca que incluso en los cuentos más imaginativos, oníricos y traídos por los pelos, siempre hay algo de verdad, por muy distorsionada y remota que esta sea...