Francamente...

- Fuente: "Berliner Illustrirte Zeitung",  1937 -

Era de esperarse que no todo el mundo iba a tener un retrato de Mylene Farmer en la mesa de trabajo, pero evidentemente todos tenemos nuestras inspiraciones y ambiciones más o menos secretas. Con el devenir de la Guerra en 1943 la imagen de arriba pasaría a tener grandes capas de tierra encima hasta llegar a un cierto aire de clandestinidad en las ceremonias, cuando el Semiramis llegó a Barcelona con los supervivientes al gulag de la 250ª, la SpanFrei Legion y los SS de nacionalidad española, junto con otros compatriotas que, en su momento, dependieron de las autoridades de la República derrotada en 1939.

Hoy, iniciando las postrimerías del 2024, cuesta imaginar cómo era el mundo y las personas en aquel entonces, muy parecido, muy parecidas, pero, sin embargo, a menos de un siglo de distancia, inmensamente diferentes en mentalidad y valores. 

Un ejemplo de discurso sin predicamento alguno (desde hace mucho tiempo) en España:

https://www.youtube.com/watch?v=FcWQLHlefCk

En 1937 se echarían las manos a la cabeza al evaluar cómo era el mundo cien años antes, en 1837, por no hablar de 1737 y aún más lejos... seguimos "evolucionando en el barreño" que es la Tierra.

Es cierto que la mente humana puede moldearse, sin demasiados problemas, a la medida de lo que necesiten los masters&commanders de nuestras vidas y, aparentemente, de nuestras almas también. 

Si de verdad apareciese cualquier gilipollas de cualquier especie en un platillo volante, a la gente se le harían la boca y el culo agua, a no ser que, estuviesen convencidos de que representara una amenaza, aunque fuera difusa. Con la IA, animalandia está siguiendo los mismos pasos...

Cualquier gestor de granja ha de tener más que claro desde hace tiempo que los humanos no necesitamos libertad, tan solo la sensación de que se tiene, de un modo u otro. Si logras eso, no te encuentras con la resistencia que tuvieron las figuras de arriba y puedes hacer con la plebe, sus cabezas y sus cabecillas lo que se desee.

Cualquier IA que se precie como tal tendría clarísimo qué es lo que necesitan los humanos y no es paz, tal y como recogía la obra GREY de Yoshihisa Tagami (1985-1987), sino guerra de cualquier clase y enemigos de cualquier tipo, sensación de escasez, pues en caso contrario se degenera (sin necesidad de ayuda) como especie y (salvo excepciones) como individuos a la molicie y las aberraciones. 

Por eso la democracia funciona tan bien, da sensación de libertad (votaciones) y de riqueza (vía deuda/impuestos) mientras que mantiene una amenaza constante de enemigos imaginarios o reales contra los que luchar: fascismo, cambio climático, racismo, bichos voladores, limitaciones a la libre circulación de personas y su acogida, aranceles proteccionistas... contra los cuales los ciudadanos ejercen su atavismo de lucha en la que ennoblecerse. 

Curiosamente nunca he visto luchar contra la subida o creación de impuestos, ni contra enviar recursos económicos o tropas a África (entre otros lugares), oponerse a dejar en libertad a criminales de toda índole y pelaje, contra la usura o la especulación con bienes básicos incluyendo la comida y la energía, la inflación, las fronteras abiertas...

Parece que no solamente la IA sabría qué hacer para tener bien encauzado al bicherío borreguil, otros ya encontraron el sistema adecuado hace tiempo y les mearán en la boca y los esclavos dirán que es ambrosía, acosando furibundamente entre gorgoteos, mientras babean el dorado orín, a cualquiera que les diga lo contrario.

"Las personas sólo ven la verdad que son capaces de tolerar."

- F. Nietzsche -

Francamente, Franco lo tenía claro, por boca del mismo Ribbentrop a Ramón Garriga, en confidencias realizadas durante un viaje en tren allá por 1943 (si no recuerdo mal), donde, según el autor, se sinceró y aconsejó sabiamente con base en un solo factor: la producción industrial.

Es conveniente tenerlo en cuenta una vez que España en particular y Europa en general han sido prácticamente desindustrializadas y ahora siguen avanzando para que no produzcamos alimentos...

Francamente, Franco sabía quién había ganado la Guerra y no se engañaba sobre la amenaza que representaba, como dejó escrito en su Testamento y Despedida, así como Ramón Garriga, mucho antes, supo que una línea de la Historia se cerraba para siempre...