Publicitado como tal durante sus años, lo seguiría siendo hasta el día de hoy. Algo sumamente curioso, toda vez que hicieron cierto paralelismo con otra conocida figura al ponerle el apodo de ser el Barón Negro. Si aquel tuvo, como cantaba cierta banda de rock hispana, un final de cómic en papel, el As que nos ocupa y su tripulación seguro que nunca imaginaron permanecer entrado el s.XXI como figuras de leyenda entre los coleccionistas, con un caché ciertamente sorprendente. UNIMAX ha fabricado en distintas escalas todo tipo de reproducciones de la época, y, cosas de la vida, en su serie "Forces of Valor" en 1/16 (lo pueden consultar en Ebay) en las series de TIGER 1 Ace Wittmann's, se pueden encontrar tanto el TIGER 222 de Villers Bocage por unos 1.405€ y el TIGER 007 Wittmann's Final Battle Limited Edition por la nada despreciable cifra de 2.284€.
Efectivamente, no hay nada similar para nadie más. Entre las "Forces of Valor" para los aliados encontramos al típico, genérico y humilde Sherman M4A3 del día D sin héroe ni As asociado; simplemente rellenado con los "average joe" que, al final, son los que ganan todas las guerras...
Ya se ha explicado por qué de semejantes números: máquinas notablemente superiores a sus oponentes en las manos adecuadas.
Sin embargo, Ases y Leyendas vienen muchas veces no por una simple cantidad de cifras, sino por una aureola (Aurum) que les adorna de una manera inequívoca, por fama, por propaganda, por lo que sea que es; y ese extra lo tuvieron sin duda tanto Kurt Knispel como Otto Carius junto con otros Ases de la Panzerwaffe que, por contra, no han capturado la imaginación del público aficionado a estas cosas. Es llamativo, ¿de dónde viene ese halo de Michael Wittmann?.
Cualquiera podría pensar, con bastante acierto, que de la mano del Ministerio a cargo del Dr. Goebbels. Pero, creo que tal institución cesó en sus funciones hace algún tiempo...
Las causas habrá que buscarlas por otros lugares.
Pero, antes de ello, vamos a ser justos. Su acción en Villers-Bocage, porque salió aceptablemente bien, no fue criticada en su momento, amén de que era de nuevo una propaganda magnífica que aumentaba la ya más que consolidada tigerphobia.
Tuvo suerte y sentó su leyenda, eso nadie se lo quita y es la típica acción que se recoge en todos los libros. No es poco.
El problema de la suerte reside en que por lo general se acaba, por eso los casinos siempre obtienen ganancias, tan solo el clan Pelayo durante una época pudo romper esa regla.
El ataque hay quien lo considera demasiado temerario, algo que terminaría por desembocar con su muerte el 8 de Agosto de 1944.
Podría ser; en la guerra este tipo de cosas suceden repetidamente y hay ocasiones donde la diferencia entre la victoria y el desastre es sencillamente una cuestión de suerte, independientemente de lo que diga una doctrina que, después de todo, siempre conviene seguir.
Especialmente no exponer los flancos...
El TIGER superviviente se revolvía en derredor recibiendo impactos continuos de 75 mm que no lograban penetrarle, hasta que dos, procedentes del mismo cañón que había destruido al 007, lo incendió por completo sin que escapase nadie de la tripulación.
Un FIREFLY en 15 minutos había dejado fuera de combate a 3 TIGER y otro M4, también con el 17 Pounds, batallando apartado de aquel lugar había dado cuenta de un par de Panzer IV a la notable distancia de 1.645 metros.
Por contra, antes de caer, los mencionados tres carros alemanes fueron incapaces de poder deshabilitar ni un solo Sherman de los que les estaban atacando.
Esta escena se repetiría cada vez de manera más frecuente, lógicamente: los éxitos alemanes nulos o escasos en ataque, pero excelentes en defensa y emboscadas, de hecho, habría un patrón de camuflaje conocido precisamente por ese nombre que tan buenos resultados ha dado siempre desde los tiempos de Varo y ya antes...
Aspecto típico de la época de emboscadas y ocultación a los depredadores aéreos.
Lejos quedaban las batallas de avance y el omnipresente Panzergrau.
Volvamos pues a la Leyenda y por qué...
As: "La palabra as viene del Latín as, su genitivo es assis; ... se refería a una moneda romana...; La palabra latina parece estar emparentada con el Griego eis = uno y la raíz indoeuropea *sem- (uno, junto)."
Aunque la misma fuente, la conocida etimologias.dechile.net, nos aclara uno de sus colaboradores que "en origen no tenía relación alguna con la idea de "uno" y que en realidad no proceda del indoeuropeo sino del etrusco".
Lo que dice este colaborador tiene sentido, pero creo que no como él piensa. El motivo viene a ser que, efectivamente y como recoge, un as (moneda) tenía muy escaso valor, y cita:
Vivamus, mea Lesbia, atque amemus
rumoresque senum severiorum
omnes unius aestimemus assis
- Catulo, s.I -
"Vivamos, Lesbia mía, y hagamos el amor
y todas las murmuraciones de los viejos demasiado severos
nos importen un único as"
(es decir, un bledo... Nota del copista)
¿Cómo encaja esto para que el As se convierta en algo tan valioso e importante?, sea referido a las personas, sea referido a los naipes, ya se sabe, póker de ases...
Como ya vimos, los romanos y posteriores conocían a los pueblos del lejano Norte refiriéndose a ellos como los finoi, los fineses, ergo, estoy seguro de que conocían la mitología de los pueblos de las tierras frías y umbrías camino a la Hiperbórea.
Los aesir son la denominación que reciben sus dioses, siendo el singular áss... Una palabra muy mal sonante hoy en día en Inglés pero cuyo significado, pese a tener asignada la misma explicación para los anglosajones y quedando como "ace", me parece que tendrían más bien este origen norteño. Pues en caso contrario sería un sin sentido o carecería de base, como claramente es observable, en las raíces que mencionan.
Me parece mucho más coherente lo que sugiero de as = dios, de los de Asgard...
Porque, además, me parece claro que no solamente a estos dioses y a las valkirias les resultan admirables las más temerarias hazañas y la muerte con valor en combate; al parecer a las personas también nos gusta y nos admira lo que son, sin duda, las Leyendas de los Ases...
—Nosotras las madres hacemos lo que podemos para mantener a nuestros hijos alejados de la tumba, pero ellos parecen anhelarla. Los bañamos de buen sentido y les resbala como la lluvia sobre las alas.
—Y, aun así, el mundo les pertenece...
Lady Olenna a Cersei, Juego de Tronos (Serie HBO)
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