Pasa en el trabajo, inconscientemente pasa en el amor, a veces en asuntos de familia, etc., etc., etc...
No es que suceda solo cuando hay dinero de por medio, lo mismo ocurre a la hora de iniciar los rituales previos al intercambio de fluidos y roces que hacen goces aunque no medie acuerdo monetario alguno ("El que paga por follar termina por ahorrar". Kiko Rivera dixit).
Las mujeres realizan pequeñas o grandes obras de arte a base de maquillaje; para los hombres chulería, labia, poder (Carla Bruni dixit) y... sí, dinero de verdad u ostentación de que se tiene, ese es el "maquillaje" de los hombres. Porque la Naturaleza es sabia y resultaría sumamente improbable que alguien como Danny DeVito pudiera encamarse con algún ángel de Victoria's Secret si no tiene algo con que negociar para ser atractivo y que pudiese compensar y limar diferencias en el maravilloso territorio del amor y el sexo.
Por ejemplo, se me ocurre, que una buena opción es tener algún que otro millón de €/$ y tratar a la objetivo de las flechas de amor como a una reina (Adriana Karembeu-Sklenarîková dixit), invirtiendo una notable cantidad de dinero en ella, de paso.
O, ser productor cinematográfico (Marilyn Monroe dixit y Úrsula Corberó, con 22 años en la época de "XP3D", dixit), al parecer, el "sex appeal" que da semejante ocupación de negocios en el mundo del cine, convierte a señores de 50 años o más, en irresistiblemente atractivos para copular. El padre de J.F.K. sabía algo de todo esto y montó su propio negociado para jóvenes aspirantes a estrellas en Los Ángeles, naturalmente, ¿dónde si no?.
Una excelsa máquina de follar que no arranca con 20€ (a diferencia de las poligoneras),
ni con 200€ que le eches encima.
Mínimo 2000€ (cash/especias) para simpatías y 20.000€ para ser...
Bueno, no sé... Hush-Hush!
Mar Saura andaba alrededor de los 6000€ por noche en su época del Westin Palace,
y la vedette Marlène Mourreau por ahí, más o menos, en sus tiempos de la "planta especial" en el Edificio Princesa 3 Duplicado de Madrid.
Y es que, las negociaciones de este tipo, las enmascaramos automáticamente en el día a día tanto como una cara de ángel lo hace con lo que vive tras esa máscara, porque si no tiene alas (las de pega y pacotilla no cuentan) y caga (que se lo pregunten al Sr. Depp), entonces no es un ángel aunque nos lo parezca.
Pero a los soñadores ambiciosos, al final, parece que cualquier cosa vale cuando tienes la opción de catar lo que no podrías hacer de otro modo.
La película es entretenida, inteligente, divertida y, finalmente, brillante entre las oscuridades de un viejo tema tan antiguo como el mundo, los sueños, los hombres, las mujeres y el dinero. Toda una lección con varios niveles sobre el arte, la pesca, lo que ambicionamos y lo que somos.
Los actores principales, simplemente excelentes, con una deliciosa Sylvia Hoeks que, posiblemente no por casualidad (sus facciones son fascinantemente perfectas), interpreta al replicante Luv en BLADE RUNNER 2049.
Muy recomendada obra para entretenimiento, meditación y, cómo no, seguir practicando con los acertijos y espejismos de los "palimpsestos" que el metalenguaje de las imágenes transmite en manos de los mejores directores de artistas y escenarios.
Toda una lección, tanto en momentos elegidos como en otros no tan evidentes, pero, a veces, el Séptimo Arte lo es de de Verdad.
Asombrosamente elaborada composición de escena. Observen bien lo que hay y lo que cuenta...
Y volviendo a la mejor oferta, a veces sucede que lo menos malo es igual a lo mejor, que lo mejor nuestro no es lo mejor de todo, aunque así nos guste o aceptemos referirnos a ello, que "tanto tienes, tanto vales" no es Verdad, pero es la verdad y que el gato que se comió el pajarito siempre sonríe satisfecho por haberse llenado sus expectativas alimentarias, sean de un tipo u otro, siempre buscamos alimento para nuestras existencias orgánicas, o no tanto, siempre habrá quienes tengan luz propia para deslumbrarnos.
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