RENDICION DE JAPON

 

Rendición de Japón firmada abordo del USS Missouri 02/09/1945

Oficialmente se produjo el 15 de Agosto al aceptar la Declaración de Potsdam, siendo formalizada por escrito ya en Septiembre.

Hasta la saciedad ha sido repetido desde entonces, que el paso definitivo para terminar con la Guerra, fue gracias a las bombas atómicas lanzadas sobre Hiroshima y Nagasaki, lo cual ahorró vidas americanas y también japonesas al acortar enormemente el tiempo que se hubiese necesitado para poner de rodillas a Japón de no haber dispuesto del arma definitiva.

La nueva arma hizo que se abandonase la estrategia del "Ketsu-go" que se basaba en la teoría de la "batalla decisiva", un viejo postulado muy arraigado entre los militares desde la Batalla de Tsushima, consistente en lograr una cantidad de bajas causadas a USA que fuera suficiente como para que relajase en sus peticiones de una rendición incondicional y obtener una Paz negociada, pues ya desde Febrero de 1945, los militares nipones tenían claro que no podían ganar la Guerra. 

Okinawa fue un ensayo de esta doctrina, el siguiente intento iba a ser en Kyushu, donde se esperaba que los americanos lanzasen su próxima ofensiva.

En 2005 el historiador Tsuyoshi Hasegawa publicó el libro "Racing the Enemy", donde aporta evidencias de que la Guerra en el Pacífico terminó debido a la entrada de la URSS en esa parte del conflicto y no por causa de las bombas atómicas. 

Sin duda, tuvo que ser un gran peso en la mente de la cúpula militar japonesa, ya que habían sido derrotados por los soviéticos en dos ocasiones a finales de los años 30 en los conflictos fronterizos de Manchuria, algo que posiblemente fue determinante para no cumplir su pacto con Alemania en 1941, mientras que Aldof Hitler si que mantuvo su compromiso, declarando la guerra a los Estados Unidos de América del Norte, al igual que afianzó su cooperación militar con Japón pese a todo.

El 18 de Agosto de 1945 los bolcheviques iniciaron la invasión de las Islas Kuriles y se detuvieron el 1 de Septiembre. Hoy en día siguen perteneciendo a la Federación Rusa.

El Alto Mando Japonés tenía claro qué podían esperar de los comunistas y el destino que podría seguir el Emperador a sus manos, como había sucedido con el Zar y su familia.

Sin embargo, el profesor de historia en la Universidad de Princeton, Sheldon Garon, mantiene que se ha dejado en el olvido y el silencio factores trascendentales que llevaron al desenlace final al colapsar el esfuerzo de guerra, la moral y el espíritu de lucha:

- Aunque estaba planeada la evacuación de los niños a zonas rurales, lejos de las bombardeadas ciudades y la lucha que se esperaba mantener en ellas, no estaban preparados para el éxodo de casi 9 millones de personas adultas que abandonaban las ciudades y que en los últimos 5 meses de conflicto paralizaron la red de transportes. Todas las carreteras que salían de Tokio permanecieron ocupadas por unos refugiados conscientes de que los militares no podrían protegerles.

- Esta escapada a los pueblos significaba que los obreros desmoralizados abandonaban las fábricas, agravando la escasez existente de productos para la guerra. Ésto, no dejaba de ser un sabotaje, lo que indicaba claramente que el orden social y la obediencia desaparecían a medida que se acumulaban señales de la derrota inminente.

Por comparación, en Alemania, el último TIGER II salió de la factoría directamente para enfrentarse a las tropas americanas que se encontraban a tan solo unos 400 metros de las lineas de montaje, en aquellos días finales de la Guerra en Europa.

- Los mandos japoneses estaban profundamente desmoralizados tras ver los resultados de la lucha hasta el final que Adolf Hitler había insistido en mantener. Los diplomáticos que se encontraban en Europa quedaron tremendamente impactados por la devastación de Alemania y aconsejaron en contra de seguir el camino de los germanos. Algo indigno y vergonzoso  según su código de conducta, pero ciertamente muy práctico.

- El Profesor Garon hace notar que fueron en realidad los alemanes los que lucharon efectivamente como samurais con honor, sacrificándolo todo a sabiendas de que era una causa perdida.

Remarca que aunque se ha publicitado mucho sobre el entrenamiento que las autoridades japonesas dictaron sobre la población para que mujeres y niños se enfrentasen a las tropas americanas incluso con palos de bambú, lo cierto es que nunca se hizo. En contraste Alemania sí que recurrió a esa movilización general, "Volkssturm", destacando entre todos las "Hitlerjugend".

Como periodista y recién acabada la Guerra, el futuro presidente de USA, John F. Kennedy dejó reflejadas en su diario unas interesantes palabras: "Se puede entender fácilmente cómo dentro de unos años Hitler surgirá del odio que le rodea ahora como una de las figuras más significativas que jamás haya vivido. Tenía una ambición ilimitada para su país, que le convertía en una amenaza para la paz mundial, pero el misterio que le rodeó, la forma en la que vivió y murió va a pervivir y crecerá más allá de su figura. Estaba hecho de la pasta de la que están hechas las leyendas."