Pocas máquinas de guerra han traspasado la barrera del tiempo y las generaciones para seguir a día de hoy como un icono de la época, de los juguetes para niños, los modelos de maquetas y coprotagonista de diversas películas.
Se produjeron unas 1.347 unidades del Sd.Kfz.181 hasta Agosto de 1944 cuando fue sustituido en la línea de montaje por el Königstiger (PzKpfW Tiger Ausf.B / Sd.Kfz.182). Alemania sabía que no podía competir en términos de producción en masa con los aliados por lo que optó por hacer un número que sabía limitado pero netamente superior en calidad y capacidad a lo que tenía el enemigo. Esta opción, tan criticada por algunos, en aquellos tiempos ha resultado ser la que se sigue hoy en día y desde hace décadas para los principales ejércitos del mundo.
El carro causó una gran impresión en su estreno ya que en su momento no tenía rival para el cometido con el que se diseñó: tanque de ruptura. La idea era que fuese la punta de lanza, en número reducido, para romper la línea de frente y tuviesen sus flancos protegidos por Panzer IV o Panzer V, seguidos por la infantería. Por necesidad se terminó usándolos en cualquier tarea, incluidas las batallas fluidas sin lineas definidas y entornos reducidos para los cuales no estaban preparados y donde podía verse rodeado por varios T-34 o Sherman que le pusiesen fuera de combate; puntos estacionarios de defensa, apoyo a unidades de infantería debilitadas o sobrepasadas...
Las zonas en verde corresponden a los puntos y distancias desde los que un Sherman podía dañar o destruir a un Tiger. Notar que desde el frente era imposible.
El manual está realizado antes de la llegada de los Sherman M4A3E8 con el cañón de 76 mm. y los Firefly con el de 17 libras, que sin llegar a cambiar las tornas equilibró bastante la balanza en términos de potencia de fuego y posibilidades de cazar un Tigre.
El Panzer VI era un Tanque Pesado, diseñado para uso en tareas específicas donde se le requería, actuando en unidades del tamaño de batallón y no para formar la fuerza principal de combate, lo que hoy se conoce como MBT (Main Battle Tank). Los soviéticos desarrollaron un concepto similar con el IS-2 que se consumaría por completo en el IS-3 y lo americanos harían lo propio con el M26, culminando con el M103.
La propaganda, como luego sucedió con el siguiente Tiger II, magnificó las características del blindado dándole un aura de invencibilidad que no era tal, pero sin duda tenía una base real que se reflejaba tal y como recoge Christopher W. Wilbeck en su libro "Sledgehammers":
"Las estimaciones de las fuerzas alemanas realizadas por la inteligencia aliada antes del Día-D muestra que los los batallones de tanques pesados eran las únicas unidades por debajo del nivel de división que los aliados señalaban en los mapas de inteligencia del teatro de operaciones."
"De las historias publicadas de ambos bandos, Aliados y Fuerzas del Eje, se sabe que muy pocos tanquistas aliados se enfrentaban en combate de forma voluntaria y directa con un Tiger o con un Königstiger. Si había otras opciones, como rodear las posiciones que ocupaban, emplear artillería o apoyo táctico aéreo contra los Tigres, esas opciones eran usadas en primer lugar."
Con la aparición del IS-2 todo cambió, llegando a decir el propio General Guderian que "No te involucres en una pelea con un 'Stalin' sin aplastar la superioridad numérica en el campo. Creo que por cada 'Stalin' debemos emplear todo un pelotón de 'Tiger'. Cualquier intento de un solo 'Tiger' por luchar contra un 'Stalin' uno a uno solo puede resultar en la pérdida de una máquina de guerra invaluable".
En realidad ambas máquinas podían ponerse fuera de combate la una a la otra a las distancias habituales de combate de menos de 1000 m.
Las tornas finalmente habían cambiado y aunque el Königstiger podía enfrentarse sin problemas al IS-2, como demostró en la bolsa de Curlandia donde 4 de ellos mantuvieron una colina estratégica destruyendo 12 IS-2, lo cierto es que la producción de 492 Tiger II no podía competir con los 3.854 IS-2 que la URSS puso sobre el campo de batalla antes de finalizar la guerra.
Y así el último Tiger pasó a la Historia y a la Leyenda...
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